Esperanza

Esperanza

Por: Jessica Garza Fernández

“Esperanza se refiere al estado de ánimo que surge cuando se presenta como alcanzable lo que se desea” Real Academia Española

Hablar de esperanza es hablar de vida. Todos los seres humanos experimentamos en algún momento de nuestra existencia ese deseo por alcanzar algo. La esperanza es esa gasolina que nos impulsa y nos mantiene enfocados y actuando para el logro de nuestro objetivo. Es esa luz interna que nos ilumina el camino para hacer que las cosas sucedan.

La naturaleza humana hace que cada uno vibremos de manera diferente, que nos inspiren cosas distintas, dirigiéndonos por rumbos variados. Normalmente compartimos nuestros sueños con algunos y nos hacemos acompañar de los más cercanos. Si bien es cierto que nuestras diferencias nos enriquecen como humanidad, también es cierto que nuestras similitudes nos unen y nos mueven con más fuerza. El COVID vino a enseñarnos precisamente esto, dándole una nueva dimensión a lo que conocemos como esperanza.

Hoy el sueño universal es el mismo: ganarle al COVID y reconstruirnos en muchos aspectos. Entendimos que los sueños personales son muy difíciles de alcanzar si colectivamente no estamos bien. Han sido meses de mucha incertidumbre donde la esperanza es lo que nos ha mantenido a flote. Los avances científicos nos tienen cada vez más cerca de lo que podríamos llamar la etapa post COVID, esperando que llegue como una evolución en la humanidad donde la solidaridad, la empatía, la unión y la sensibilidad sean el común denominador en nuestra sociedad.

En COMUNIDAR hemos palpado todo este proceso de cambio que se ha ido gestando poco a poco. Hemos visto cómo la participación ciudadana ha cerrado la brecha haciendo propio el sueño colectivo. Somos testigos de cómo con la suma de voluntades se alcanzan grandes realidades. Hemos tenido la fortuna de ver cómo la esperanza se ha hecho tangible mediante los proyectos que articulamos junto con todos ustedes y que han ayudado tanto en esta contingencia. Un claro ejemplo es Unir y Dar, el movimiento ciudadano de empatía regiomontana en respuesta al COVID-19.

Decir que han sido meses difíciles sería insuficiente para poner en palabras este hecho histórico que nos ha sacudido. Sin embargo, la teoría dice que en todas las adversidades hay belleza colateral y hoy ha quedado clara, pues hemos visto cómo el miedo se ha convertido en acción, la tristeza en creatividad y la desolación en solidaridad.

Aún queda camino por recorrer, pero no olvidemos que ya demostramos que juntos somos más fuertes. La esperanza, como hoy la entendemos, nos impulsa a no detenernos, a intentarlo nuevamente, aunque la lógica diga lo contrario, pues es el corazón lo que nos hace seguir para poder entrelazar la adversidad con el triunfo.

Gracias por permitir que COMUNIDAR sea parte de esta transformación.